3 estrellas
6
I.N.R.I.
Título original: I.N.R.I.
Año: 1923
País: Alemania
Duración: 102 min.
Género: Drama, Histórico
Categoría: Películas cristianas
Edad: TP
Director: Robert Wiene
Guion: Robert Wiene
Música: Willy Schmidt-Gentner
Fotografía: Axel Graatkjær, Reimar Kuntze, Ludwig Lippert
Reparto: Gregori Chmara, Henny Porten, Asta Nielsen, Werner Krauss, Emanuel Reicher, Alexander Granach

Poco antes de dirigir este largometraje, Robert Wiene se había convertido en uno de los grandes precursores del expresionismo alemán con El gabinete del doctor Caligari. Por entonces, Alemania era un referente cinematográfico a nivel mundial, con talentos como Lubitsch, Murnau, Lang y, en menor medida, el propio Wiene. Por eso, de esta adaptación muda de la vida de Cristo podría esperarse más, sin embargo, ningún realizador está igual de inspirado en cada película.

El metraje original de la obra tiene una duración de unos cien minutos, que más tarde se editó para su lanzamiento en Estados Unidos, con el título Crown of Thorns. Esta reseña corresponde a una versión de poco más de setenta minutos, que comienza con la Natividad, prosigue con la escenificación de varios pasajes del Evangelio y pronto llega a la Pasión, que es donde principalmente pone el foco.

Aparte de basarse en la Escritura, Wiene tomó como referencia una novela del austriaco Peter Rosegger. Concede un significativo protagonismo a Judas, aunque este personaje, más que por su peso en el conjunto, llama la atención por sus connotaciones políticas, ya que incita al Maestro a ser el líder de un levantamiento del pueblo judío contra los ocupantes romanos. Jesús es mostrado con tanta solemnidad que resulta distante. El elegido para interpretarle fue el ruso Gregori Chmara, cuya fecha de nacimiento no se conoce con exactitud, pero es posible que tuviera unos treinta años durante la filmación.

Pese al distinguido elenco de actores de la producción, sus decorados y un considerable número de extras, el resultado no es del todo satisfactorio. La cinta está excesivamente teatralizada, incluso para la época muda, y carece de la fluidez que tenían, dentro de su sencillez, sus dos precedentes más relevantes de la década anterior: la norteamericana Del pesebre a la cruz y la italiana Christus.

La película, aun con sus carencias, tiene destellos de brillantez, como la representación de la Última Cena o de Cristo con la cruz a cuestas, una icónica imagen -la del Nazareno- de mucha plasticidad en casi cualquier film. También destacan los agradables tonos dorados de su fotografía en blanco y negro.

I.N.R.I. (fotograma)