Año: 2022
País: Estados Unidos, Corea del Sur
Duración: 124 min.
Género: Drama, Biográfico
Categoría: Películas cristianas
Edad: +18
Director: Rosalind Ross
Guion: Rosalind Ross
Música: Dickon Hinchliffe
Fotografía: Jacques Jouffret
Reparto: Mark Wahlberg, Mel Gibson, Jacki Weaver, Teresa Ruiz, Aaron Moten, Cody Fern
Tras frustrarse su carrera como boxeador, Stu se propone ser actor y se traslada a Los Ángeles, donde encuentra trabajo en un supermercado. Allí conoce a Carmen, una mexicana católica de la que queda prendado. Aunque no es creyente, comenzará a asistir a la iglesia para conquistarla e incluso se bautiza, tratando de impresionarla. Pero lo que en principio era poco más que el fruto de un enamoramiento, tomará un cariz diferente cuando sobreviva a un grave accidente de moto.
Mark Wahlberg es el gran impulsor de esta película basada en la vida del sacerdote Stuart Long. Aparte de contribuir como productor, tuvo que experimentar un importante cambio físico para representar el papel del padre Stu. La cinta ha sido dirigida por la debutante Rosalind Ross, también autora del guion. Esta realizadora y actriz es pareja de Mel Gibson, quien interpreta al alcohólico y malhumorado progenitor del protagonista.
El hermano de Stu falleció con solo seis años y sus padres se separaron. Su duro pasado ha dejado huella en él y su conflictivo carácter no se parece en nada al de Carmen. Sin embargo, a través de ella se adentra, de forma poco ortodoxa, en un ámbito nuevo para alguien educado en un entorno ajeno a la religión. Más adelante, su accidente de moto le abrirá las puertas a un futuro completamente distinto, porque le lleva a sentirse llamado al sacerdocio. Al rector del seminario, que duda sobre su idoneidad, le transmite su deseo de luchar por Dios, en un inusitado trayecto del cuadrilátero al púlpito.
El film utiliza con frecuencia el humor y resulta entretenido, pero sus responsables han estado tan pendientes de que no parezca una película piadosa que se pasan de rosca con el lenguaje soez. Una historia de este tipo, con actores conocidos, tiene ya de por sí potencial suficiente para enganchar a descreídos. Y para enfatizar en la transformación de Stu, quien es evidente que no es un santurrón, hubiese sido preferible indagar más en su inesperada vocación.
En el tramo final el relato da un giro, afrontando cuestiones tan complejas como la aceptación del sufrimiento. Aunque irregular en su conjunto, se trata de una propuesta interesante, que cuenta con un entregado Mark Wahlberg y el buen trabajo de los secundarios Mel Gibson y Jacki Weaver, esta última como madre del protagonista.
